Respetar la libertad de los demás

Es necesario aprender a respetar la libertad de los demás. Ya sé que suena a obvio, pero la experiencia me dice que no debe serlo tanto, porque a diario me encuentro con que es frecuente encontrarse con lo contrario... Y cada vez que me topo con uno de estos ejemplos me pregunto qué estoy haciendo yo al respecto...

Se me antoja una de las lecciones más difíciles que se nos plantean en la vida. Quizás alguien esté pensando que exagero, que vivimos en el siglo XXI, que tenemos sociedades democráticas y más o menos "civilizadas" en las que la inmensa mayoría de los seres que las pueblan se respetan mutuamente. Pero la visión general de la sociedad necesariamente nos hace perder detalle, y es en ese detalle donde las cosas muchas veces muestran ser distintas de lo que parecían a simple vista.

Por ejemplo, cuantas veces escuchamos cosas como esta:"eres muy libre de hacer lo que quieras pero yo creo que te equivocas". Es una frase muy cortés, que no podemos esperar de cualquiera, más bien deberiamos pegarnos con un canto en los dientes si nuestros amigos piensan más o menos así... Sin embargo me planteo si el juzgar como negativa la elección de esa persona es respetarla. Evidentemente que no podemos impedirle hacer lo que le parezca, por lo tanto tiene libertad para hacerlo, pero el juicio negativo emitido sobre su elección de alguna forma es fácil que le condicione. ¿No sería más respetuoso pensar que cada uno somos los más indicados para decidir sobre las cosas que nos afectan, y que cada uno elige lo que en ese momento y con la información que tiene siente que es mejor para él?. Porqué entonces colgarle la etiqueta de "equivocada" a su decisión?. Lo suyo sería decirle: "si lo sientes así, seguro que es lo mejor para ti en este momento". No...?.

Con demasiada frecuencia nos olvidamos de que cada uno andamos esta vida a nuestra manera, lo que incluye no solo la forma de andar sino la velocidad a la que lo hacemos. Tanto la forma de andar como la velocidad a la que andamos cambian a lo largo del camino. Y a veces es complicado respetar que las personas en general y las que están más cerca de nosotros en particular, no viajen de la misma forma que nosotros. Pero es necesario. Igual que es necesario defender nuestra propia forma de viajar en cada momento, porque es la mejor para nosotros. Más rápido no quiere decir mejor...

Si no somos capaces de respetar a las personas que queremos, ...cómo seremos capaces de respetar a los que ni siquiera conocemos?. Cómo podemos esperar que un país respete los derechos de los habitantes de otro, si además ese respeto implica una pequeña disminución en nuestra maravillosa calidad de vida...?. Cómo podemos esperar que judíos y musulmanes se respeten...? (son solo ejemplos al azar que se me han ocurrido, pero que pretenden ir aumentando la escala de la imagen...).

A ver si al final toda la violencia en el mundo va a ser solo una inmensa y continuada falta de respeto a la libertad de los demás...